El nuevo modelo de cotización para autónomos, casi listo para su aprobación

Aunque el acuerdo sobre el nuevo Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) todavía no está cerrado del todo, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y las asociaciones de autónomos han dado el visto bueno a los nuevos tramos de cotización para los trabajadores por cuenta propia.
Tras más de un año de
intensos tiras y aflojas, a la reforma de la cotización de los autónomos ya
solo le quedan los últimos flecos por cerrar para estar totalmente lista para
su aprobación. La Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), la Unión de
Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) y la Unión de Asociaciones de
Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) han aprobado los nuevos
15 tramos propuestos por la cartera de José Luis Escrivá.
El acuerdo alcanzado supone eliminar el sistema actual de base mínima prácticamente homogénea para
todos los autónomos con independencia de sus ingresos a otro en el que se
establecen una serie de bases mínimas crecientes en función del tramo de
rendimientos de cada trabajador. El sistema constará de 13
tramos, cada uno con su base mínima y su cuota correspondiente que los
trabajadores podrán superar, pero nunca quedarse por debajo.
Aunque todavía faltan por negociar algunos
puntos del acuerdo, ya se ha pactado la tabla de
cotizaciones para la primera parte de los nueve años de periodo transitorio que
comenzará en 2023 y terminará en 2025.
Fuente de información:
Autonomosyemprendedor.es
Estas tablas se irán revisando hasta 2032 que
será cuando, previsiblemente, cada autónomo cotizará
únicamente por los ingresos reales que obtengan por su trabajo, de
forma similar a los asalariados.
Así, el último documento establece para 2023 una
cuota de 230 euros al mes --siete euros menos que en la última propuesta-- para
los autónomos con rendimientos inferiores a 670 euros netos, y van hasta los
500 euros mensuales para el tramo máximo, en el que se encuentran aquellos
trabajadores por cuenta propia con ingresos netos mensuales superiores a 6.000
euros. Las cuotas se irán ajustando en 2024 y 2025.
Tres de los tramos se sitúan por debajo del
Salario Mínimo Interprofesional (SMI) actual y todos ellos cuentan con una
rebaja en su aportación. El primero de los tramos, para quienes ganan menos de
670 euros al mes, contará con un ahorro de 64 euros mensuales el primer año y
seguirá bajando hasta los 94 euros en 2025.
El segundo de los tramos, que va desde 670 euros
hasta 900 euros, tendrá un ahorro mensual de 34 euros en el primer año hasta 54
euros al final del periodo. Y el tercero, que va hasta el SMI (1.166,70 euros)
tendrá un ahorro de 19 euros el primer año y de 34 euros mensuales el último.
El nuevo sistema también baja testimonialmente
la aportación del tramo inmediatamente superior del SMI y que va hasta los
1.300 euros de rendimientos netos, aunque el ahorro es de apenas 3 euros al mes
durante los tres años. Los tramos intermedios, que van hasta 1.700 euros se
quedan como están, con una cuota mínima de 294 euros al mes.
A partir de aquí empiezan las subidas. Son hasta
nueve los tramos que soportarán un pago adicional cada mes que oscila entre 16
y 206 euros al año en 2023 y que irá subiendo hasta situarse en un abanico de
entre 56 y 296 euros al mes en 2025. Esto significa que, para el tramo más
alto, el de autónomos con rendimientos superiores a 6.000 euros, la cuota
mínima se duplicará en el año 2025. Se trata de una subida importante, pero en
ningún caso se acerca a la propuesta inicial que hizo el ministerio que
contemplaba subir en 1.000 euros la base mínima para quienes ganaran más de
4.000 euros al mes, con un periodo transitorio de diez años.
Si bien las asociaciones de autónomos han dado
visto bueno a los tramos, el acuerdo sobre la reforma aún no se ha cerrado a
falta de algunos flecos.
Escrivá ha tenido que rebajar significativamente
el nivel de ambición de su propuesta para conseguir convencer a las
asociaciones de autónomos. Es decir, aceptar que el déficit del sistema se
reducirá mucho menos. A cambio, conseguirá sacar adelante esta importante
medida con consenso social, un hito clave para conseguir que se pueda
implementar y que sea duradera.
Los trabajadores fijarán al inicio de cada año
su cotización en función de la previsión de rendimientos que tengan para ese
ejercicio. Sin embargo, podrán ir modificando su aportación a lo largo del año
en función de cómo vaya la facturación de su actividad. Finalmente, ya a año
vencido, regulará su contribución como si se tratara de la declaración anual
del IRPF.
A los rendimientos netos declarados se les
aplicará una rebaja general del 7% en concepto de "gastos genéricos"
para cubrir aquellos costes que no sean deducibles en el IRPF. El texto incluye
otras novedades importantes como es la tarifa plana para los autónomos que
inicien su actividad. Tendrá una duración de hasta dos años (el segundo año
sólo para quienes sigan con unos rendimientos inferiores al SMI) y la cuota
mensual será de 80 euros.
Declarar por ingresos reales
Con la aprobación del nuevo sistema, la
cotización a la Seguridad Social de los trabajadores por cuenta propia dará un
vuelco radical porque se pasa de un mecanismo en el que los
empleados eligen voluntariamente su cotización a uno en el que declaran según
sus ingresos. Eso sí, no implica cambios en cómo se
calcula la pensión y en cuándo se consigue el derecho a una.
El acuerdo contempla una modificación progresiva de las bases y tipos de cotización,
que irán subiendo en el tiempo para los autónomos con mayores ingresos y
bajarán para los de menos ingresos. Entre los objetivos de la medida está
evitar una brusca subida de cotizaciones en el primer año.
Estos trabajadores dispondrán de 15 tramos
de ingresos con una horquilla de ganancias cada uno de ellos, en los que se
deberán enmarcar cada trabajador en función con los ingresos netos que prevea.
Una vez escogido el tramo, se le aplicará la base de cotización correspondiente
a esa horquilla de ganancias y a esta base se aplicarán, a su vez, los tipos de
cotización (porcentaje sobre la base) que determinen los Presupuestos Generales
del Estado cada año. Esta operación dará como resultado una cuota que será la
que deba abonar mensualmente el autónomo. Además, la base se podrá modificar
hasta seis veces en un mismo año.
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y
Migraciones, José Luis Escrivá, acudirá este jueves al Congreso para informar
del preacuerdo alcanzado con las organizaciones de trabajadores autónomos sobre
los nuevos tramos de cotización.